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Los Juegos Olímpicos de París nos hacen reflexionar sobre la importancia de tener un equipo eficiente para alcanzar los resultados deseados, ya sea en el campo o en las empresas. Crear un equipo ganador en el entorno corporativo requiere algunas etapas fundamentales, como se destaca a continuación.
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Establece la confianza
Toda empresa exitosa tiene una cultura de trabajo dinámica, guiada por un liderazgo efectivo. Como líder, es importante construir una relación de confianza con los colaboradores. Cuando el equipo confía en ti, tus decisiones son tomadas en cuenta. Sin embargo, la confianza no se gana de la noche a la mañana; es algo que debe cultivarse y preservarse.
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Crea una cultura positiva
Antes de crear una cultura positiva, es importante determinar y reconocer las características culturales de la compañía. Como líder, tu perspectiva puede ser completamente diferente de la que tienen las personas que trabajan en la empresa.
Define las cualidades ideales que deseas integrar en la cultura de tu compañía. No hay una cultura que sirva para todas las organizaciones, ya que las compañías diferentes tienen prioridades diferentes.
Por lo tanto, define la cultura ideal de trabajo basada en la visión que tienes de la compañía. Ten en cuenta que un ambiente de trabajo positivo, abierto y transparente es esencial para producir buenos resultados y retener a los mejores talentos.
Abraza la diversidad
Permite que los orígenes y puntos de vista individuales contribuyan a la toma de decisiones más equilibradas, haciendo de la empresa un lugar de inclusión. La diversidad no solo significa una cuestión de fenotipo y origen étnico, sino también adoptar diferentes puntos de vista, ideas y formas distintas de ver el mundo. Brasil es prácticamente un continente en este sentido, tanto territorialmente como debido a la mezcla de diversas culturas que formaron el país.
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Define las funciones y responsabilidades
Para que un equipo tenga éxito, es fundamental que cada persona entienda, de manera exacta y amplia, cómo su función contribuye a los objetivos del negocio. Esto implica delinear claramente las funciones y responsabilidades de cada miembro, evaluando sus habilidades y competencias para asignarles roles alineados con sus fortalezas.
Establecer objetivos específicos y medibles, fomentar una comunicación abierta, documentar las descripciones de trabajo y revisar regularmente las responsabilidades son pasos cruciales en este proceso. Al hacerlo, se evita la duplicación de esfuerzos, se potencia la eficiencia y se asegura que cada miembro se sienta valorado y consciente de su contribución al éxito de la empresa.
Define metas y objetivos
Cuando sabemos hacia dónde vamos, es más posible encontrar medios para que el camino sea más fácil. Invita al equipo a ayudarte en estas definiciones y revisa el plan regularmente. Esta actitud tiende a desarrollar la colaboración entre el equipo, además de reforzar el compromiso del equipo con la empresa. No olvides celebrar los logros relevantes.
El siguiente paso, después de definir los objetivos, es evaluarlos regularmente y dar feedback. Si deseas alcanzar un objetivo, monitorea el progreso. Se dice que monitorear esta evolución frecuentemente aumenta las posibilidades de alcanzar tus objetivos con éxito.
Dar feedback regularmente ayuda a los colaboradores a alinear su desempeño con la cultura y las expectativas de la empresa. Además, la calidad del trabajo mejora y hace que sean aún más productivos.
Gestiona conflictos
Un problema pequeño puede convertirse en una crisis grave si no se trata adecuadamente. Siempre que sea posible, busca la ayuda de otras personas para desarrollar una solución en conjunto en lugar de imponer tu propia decisión.
Recompensa para retener
La remuneración es importante para todas las personas, pero elementos como horarios de trabajo flexibles, beneficios educativos, reconocimiento y planes de carrera, entre otros, son muy valorados actualmente.
Aprecia y recompensa el buen trabajo
Los profesionales tienen agendas llenas y una lista de tareas que necesitan terminar dentro del plazo. Por lo tanto, cuando realizan más allá de las expectativas, como líder, reconoce el esfuerzo. Los programas de reconocimiento y recompensas son los primeros pasos para crear una cultura de trabajo positiva. Este comportamiento mejora el clima y motiva al equipo a trabajar aún mejor en el futuro.
Enfócate en el compromiso de los colaboradores
Si el equipo se siente desplazado y desmotivado, esto trae un problema para el ambiente de trabajo. El liderazgo necesita encontrar una manera de mantener a los colaboradores felices y comprometidos con el trabajo.
Muchas compañías organizan actividades de compromiso. El éxito de estas actividades no siempre está ligado al presupuesto que estás dispuesto a usar en ellas. Para que una actividad sea exitosa, el secreto es planificar, ser flexible y fomentar la participación.
Mantén a los profesionales felices
Un equipo feliz tiende a trabajar más motivado e inspirado. Mis recomendaciones son: conoce a las personas; entiende sus puntos positivos y de mejora; y presta atención a los niveles de estrés, principalmente relacionados con la alta carga de trabajo.
